Paso a menudo por esa calle, y había otra heladería en ese lugar, y le cambiaron el nombre nada más porque adentro sigue siendo lo mismo, que yo recuerde y por eso no califiqué el ambiente con 5 estrellas. Dicho esto, vamos a lo importante, hay una enorme variedad de helados distintos, los hay con base de yogurt y otros con la base de leche. Te dan a probar para ver cuál vas a comprar, yo probé el de arroz con leche, y definitivamente algo distinto y muy rico, pero cómo era mi primera vez, quise ir por un clásico. El helado que terminé probando fue el de dulce de leche, que estuvo muy rico, la cremosidad del helado es una de las cosas que me gustan más cuando como un helado artesanal. La cremosidad se la da el proceso de incorporación de aire a la mezcla, que le agregar pequeñas burbujitas que en el paladar se derriten y dejan escapar el sabor. Habían otros que visualmente se veían deliciosos, cómo el de frutos rojos o frutos del bosque, que tienen una salsita arriba o el de pistacho iraní que es uno de los próximos que iré a probar. El valor por cono o vaso es de $4 para una bola, dos salen en $6, y creo que tienen milkshakes.