Casa escondida es un lugar acogedor, no solo para cenar, si no también para conversar tranquilo, para un café y postre etc, no importa la ocasión no defrauda. El ambiente es relajante con mucha naturaleza y curiosidades, desde los libros de cocina, las diferentes formas de vidriería, las fotos de como era antes la casa y demás. El servicio es excelente, hay 3 meseros en particular que son lo máximo, Don Luis, otro Luis y Kevin Alejandro. Las comidas más ricas que hemos probado son la pasta mediterránea y viene bastante es originalmente con camarones pero puedes pedirlo con pollo, la entrada de camarones tempura con mayo siracha (la amamos, lo único que le cambiaríamos es el tamaño de la porción nos parece pequeña), de bebida alcohólica el cóctel "Del Alba" es delicioso, de postre, nuestro favorito fue el pecan pie con helado de vainilla, otro que es bueno es el mousse de chocolate también con helado de vainilla.

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