escogimos este lugar para cenar por qué unos amigos nos habían comentado de él. lastimosamente no me gustó, al llegar el mesero te pone en aviso que el aire va y viene y la realidad es que siempre hace un frío insoportable. pedimos una entrada de pan con mozarella y pesto que si está rica, luego pedí una pasta de langostinos con peperoncini, el picante nunca se sintió y además le echaron demasiada cebollina que fue imposible comerme el plato. el mesero silplemente dijo que si venía así. no lo recomiendo para nada 👎