Experimenté una experiencia maravillosa en Mai Mai; su ambiente me cautivó, especialmente desde la terraza, que ofrece una acogedora vista. Degustamos deliciosas entradas, desde la jalea de mariscos bañada en jugo de limón hasta el exquisito siu mai y los dumplings, todo acompañado de una refrescante cerveza Ichiban. Su concepto de fusión peruano-japonés-caribeño se presenta como algo justo y necesario. ¡Una experiencia gastronómica que definitivamente recomendaría