Debo iniciar explicando que fuimos a casi 40 minutos de la hora de cierre y quedé sin palabras. LA ATENCIÓN FUE ESPECTACULAR. De inicio a fin la atención fue inigualable, muy amables siempre con una sonrisa. De verdad fue muy agradable para nosotros. El ambiente dentro del local se siente reservado, música de jazz suave con luz tenue que da sensación de privacidad. Los sushis buena porción y excelente sabor. Quedamos de volver.