Es un lugar de modo bueno para tardes de verano, hay que ir con ropa cómoda porque hace calor, pero se llena mucho y hay que hacer reservación con tiempo en servicio puede mejorar la comida bastante regular para el precio y la coctelería es realmente insípida, el mojito sabia a limonada el gin tonic solo era agua tónica el de saril tenía más sabor uno que venden embotellado en el súper, la verdad dudo mucho que vuelva