Fuimos a cenar a las 8:18 pm del viernes 29 de diciembre y nos querían dejar entrar ya que la cocina ya estaba cerrada? Afortunadamente el cocinero nos tomó el pedido; nos sirvió ya que ninguno de los meseros nos quiso atender tampoco!! el Seguridad tenía instrucciones de no dejar entrar a nadie al estacionamiento por instrucciones del personal del restaurante. Lo "ÚNICO" positivo de la experiencia fue la atención del cocinero y los excelentes sabores de los emparedados de filete y mozzarella. Recomiendo a los dueños validen los horarios de apertura y cierre por día, de forma de evitar malos momentos y definitivamente brinden un servicio de atención de calidad!

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