Empezando con lo positivo es que la variedad del menú es amplio y para gustos distintos, desde carnes hasta pastas. Pedimos de entrada Hummus, tartare de Atun (que lo súper recomiendo) y ceviche que estaba buenísimo. La calidad de la comida me pareció buena también. Si había algo de desorden en la cocina, salieron platos fuertes antes que entradas, se equivocaron en las bebidas y puede ser por el timing o la época pero el servicio estuvo un poco deficiente hoy. De los postres, el pie de Limón que recuerdo delicioso, hoy no solo no sabía a limón, sino que el crust parecía faltarle cocción en ciertos puntos. En general bien, vovleria para ver si el tema del servicio fue puntualmente hoy, ya que la comida vale la pena.