Siempre había escuchado hablar muy bien de las pizzas (no soy muy fan de sus cervezas, peor la PILS, sí me gusta), así que decidimos probarlo. El ambiente de pub, excelente: la música alta al punto exacto que permite conversar y alegra el lugar (buena mezcla). La comida, OK (pero la salsa de la pizza, sorprendentemente rica). Probamos los nachos, la quesadilla de pollo y la pizza "la rana". Gastamos $55 en dos pintas y esos 3 platos, lo cual no estuvo nada mal, considerando que éramos 4 personas. Regresaría con mucha probabilidad.