Este restaurante rooftop tiene una vista espectacular del skyline de Panamá. La comida estuvo rica, pero me pareció cara considerando que las porciones eran pequeñas. Pedimos empanadas de pulpo, tartar de atún, baos de short rib, tacos de salmón, sliders de angus y la pesca del día. El servicio me pareció regular. A pesar que era día entre semana, la atención fue lenta y nos tuvieron medio olvidados. No estaban al pendiente del comensal. En conclusión, sólo regresaría por tragos pero no pienso volver a cenar aquí.

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