¡Excelente experiencia! Muy rico y lindo sitio para desayunar. Desde que entras el Valet Parking te recibe de una manera muy amable. No teníamos reserva y el señor nos indicó que si esperábamos par de minutos y una reserva de las programadas no asistía, nos podía ubicar en una mesa. Al entrar nos encontramos con un sitio muy bonito, moderno y minimalista. La comida está a otro nivel recomiendo las papas trufadas con parmesano, el chicken sandwiche, el pork Belly y las donuts de pistacho 😍 Tuvieron un pequeño retraso para atendernos (una vez que nos sentamos) y la encargada Diana se acercó muy amablemente para disculparse y nos ofreció una cortesía. Todo muy rico! Volveremos

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