La atención fué cordial y amable al momento de nuestra llegada y durante toda el rato que estuvimos. Respecto a la comida; ordenamos Alambres de Pollo y dos Margaritas de Maracuyá. Los alambres de Pollo, estaban en su punto, en todos los sentidos. Buen aspecto, buena sazón. El picante bastante picante a lo mexicano. Las Margaritas, estaban buenas, con perfecto nivel de alcohol, para acompañar la comida. Definitivamente regresaré. Única observación, es que deben regular la temperatura del aire acondicionado, ya que debido a la posición del sol, a la hora que fuimos, se sentía muy poco el aire. Por todo lo demás... excelente.