Mientras caminaba por el mall encontré este lugar que por fuera no parece restaurante, su decoración es un concepto muy distinto. Te adentras en la selva con sonidos relacionados y sus dinosaurios mecánicos, divertido, vistoso y excelente para ir con niños. Tiene variedad de platillos y precios. Probé un pollo con hongos muy rico, los vegetales salteados deliciosos y los patacones crujientes. La porción me sorprendió porque fue bastante la porción de mi proteína, el resto me pareció porciones equilibradas. La atención muy cálida. Espero volver y probar algo mas!.

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