Buena comida mexicana que asemeja y recuerda a los sabores de otro famoso restaurante mexicano en Panamá. Note a los meseros un poco abrumados por la cantidad de personas, pero lograron cumplir con la mínima de lo esperado. Nuestra visita coincidió con música en vivo lo cual no fue del todo agradable ya que la bocina estaba a escasos metros de nuestra mesa y el sonido un poco alto, lo que imposibilitaba el poder charlar amenamente. Puedes pedir los nachos o la sopa de tortilla y no te decepcionaran.