El sitio es bonito y la música buena, es un street food así que no hay mucho que esperar, pero para comer algo y pasar el rato, está agradable, la música estaba acorde, en líneas generales, bien. la salonera estupenda, nos ofreció agua al sentarnos, muy atenta, pendiente de la mesa, además de muy cortes y atenta, al servicio de salón 5/5. La Cocina fatal, 35 minutos para una hamburguesa fría y un roll que solo sabía a plátano. La comida nada que ver, pedí una hamburguesa con bacon, la temperatura ya estaba fuera de rango, la carne estaba casi dura y el pan se sentía poco fresco Chino recalentado en micro ondas, la verdad que el conjunto, fatal, parecía que habían devuelto la burger y me la vendieron a mi, las papitas aguadas y súper saladas, muy mal fritas. El roll básicamente sabía a empanada frita, no había presencia de sabores, era como comerte algo frito que hacía crunch, y sabía a plátano. No se si por que había descuento, todo lo hacían de malas, pero la verdad que para la cocina, esta vez, es una F.

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