Este es un clásico que tenia años de no ir y la verdad que mantiene su calidad de comida y los precios bastante aceptables, ideal para pasar con la familia y amigos. El pan de la casa que dan es excelente, e probado la lasaña gratinada de carne y el churrasco a caballo y todo excelente, la malteada también muy buena. Tienen un menú muy amplio y la atención de los meseros excelente. Seguiré viniendo aquí.