Es un restaurante más para ir a tomar unos tragos que para cenar, la verdad no me encantó, éramos 3 personas y pedimos 6 small plates y fue suficiente para todos, pero de los 6 solo nos gustaron realmente 2, los demás no fueron encantadores, en cuanto al ambiente es cool y el servicio fue bueno por parte del salonero pero la anfitriona tiene cero en servicio