Fue la PEOR experiencia en Panamá, fuimos a celebrar con la familia, quedamos esperando de ser atendiendo. Después de casi 15 minutos apareció el Sr Avatar, el encargado del resturante, con un actitud muy grosero. Nos dijo no tengo tiempo, pide rápido o me voy. Incluso llevnto la mano como que Vayamos. Nosotros como educados, le digemos que esta no es la manera y fuimos. Algunos eramos mayores de edad. Esto hay que reportar a las autoridades y la asociación de restaurantes en Panamá