La comida aquí nunca decepcionada. Lo que más me agrada es que las porciones son grandes para los precios que son bastante accesibles. En esta ocasión quise probar el Tao Roll en lugar de pedir el usual Unagui Shangai que tanto me encanta. El Tao Roll tiene un topping de plátano, uno de mis ingredientes favoritos cuando de rollos se trata; sin embargo, el sabor dulce del plátano quedó eclipsado por el resto de los ingredientes. La atención fue muy buena. Las chicas son muy atentas y amables. El restaurante es más grande de lo que aparenta, lamentablemente no hay muchos estacionamientos disponibles y son algo difíciles de acceder. En cuanto al ambiente dentro del restaurante, es bastante agradable.