El restaurante en Condado del Rey es algo pequeño, pero acogedor, un grupo de más de 6 sería un problema. La chica que nos atendió, super amable y pendiente en todo momento. La comida fue servida rápido a una buena temperatura, humeante pero no incomible, permite disfrutar de todos los aromas y sabores de cada platillo. Una sangría blanca con sabor y un delicado toque de licor, sumamente refrescante. No es un sitio económico, pero si vale la pena el gasto.
1 Me gusta