Fui con mis hijos y un grupo de amigos a compartir la cocina cantonesa. En esta ocasión me dejaron un poco mal con la recomendación. El servicio estuvo malo...y ya es la segunda vez seguida...ya no están las paisanas y ahora tienen a 2 chicas panameñas que nada que ver...no conocen el menú y parece que nunca han probado nada de ahí tampoco...lo único rescatable de esta visita fue el puerquito al carbón y se lo tuve q explicar varias veces a la chica para q me entendiera...lo otro que le tomó tiempo tomar el pedido correcto fue el pescado en "racimo de uva"....no tenía idea de lo que le estaba diciendo...y lo peor es que no quedó bien...me hicieron pasar verguenza...por favor paisanos pongan atención que se les está dañando el negocio...