Me fue dificil ubicarlo el letrero es obra de un diseñador maya un geroclifico tuve que mover la cabeza como los perros para poder leer el ambiente musical era ruidoso la gente casi gritaba no acompañaba para la digestion edtabamos apiñados como sardinas habia que levantarse para dejar pasar a las personas La atencion de la mesera fue buena pero las ordenes super demoradas una hora y media la comida no estaba mal ordene empanadas de wanton rellenas de escabeche no tenian casi relleno y no sabian a escabeche ordene carimañolas rellenas de pulpo no tenian asi relleno y no senti el sabor a marisco ordene unas alitas en salsa de saril no senti el saril pienso que le falto gengibre pero todas las ordenes son mini ordenes con precios muy altos para lo que ofrecen ademas en la puerta se me hizo un pequeño cuestionario me senti incómodo pero es el tipico lugar sobrevalorado inflado por las redes sociales no regresaria.