La vieja confiable. Venir es garantía de que encontrarás en el menú tu plato favorito o algo nuevo que probar. La atención estuvo superlativa, muy pendiente y amable. El ambiente, como siempre, muy agradable. Las costillas estuvieron bien en tamaño, presentación y sabor; pero el plato no llegó tan caliente y, por consiguiente, se hizo más difícil poder degustarlo. Es preferible que llegue crispeando de calor.