La Taberna siempre a tenido un gran ambiente, sobretodo en la terraza que es un espectáculo. Pedimos una paella de mariscos que estuvo espectacular. La acompañamos con sangría y fue la combinación perfecto. 10/10 Sin embargo el servicio en la terraza no fue bueno. Pedimos una de mis acompañante pidió un refill para su sangría y luego de esperar y largo tiempo tuvimos que llamar a otra persona (tal vez era el supervisor) para que nos trajeran más sangría. El salonero encargado de la terraza estuvo casi todo el tiempo metido en su celular.