Muy buen rincón para frecuentar y relajarse a la salida del trabajo. Buena música, ambiente de taberna tranquila, opciones de cervezas para los gustos artesanales innovadores y para las más tradicionales como yo. Precios razonables. La comida tiene mucho sazón y buenos precios. Vale la pena degustar las distintas picadas, pizzas, alitas, salchichas, nachos, con cada visita.