Primera vez que visito la sucursal de Casco Antiguo. Por tratarse de un lugar turístico, juraba que superaría las expectativas; pero, al final, no cumplió ni los estándares de las demás. Éramos 6 personas y todos pedimos platos diferentes. La mayoría comentó que las porciones se veían más grandes; pero que les hacía falta algo de sabor. El wrap no fue la excepción y, de hecho, fue la mayor decepción: se veía inmenso; pero solo era lechuga y no hubo manera de agarrarlo sin que terminara desarmándose y cayéndose los otros ingredientes. El servicio estuvo escaso y, en varias ocasiones, hubo que hacer un esfuerzo para conseguir que nos atendieran, hasta para la cuenta. Seguiremos yendo a Nación; pero no a esta sucursal.