fuimos i. domingo a desayunar. El sitio es acogedor, pequeño pero bonito y organizado. el desayuno delicioso, una buena carta y variedad de opciones. el punto negro lo tiene el servicio. por ser la primera no sabíamos que el pedido de os hacerse en la caja, pero nadie nos explicó, hasta que fuimos directamente a preguntar. es un sitio pequeño con pocas mesas. no de Erica ser complicado ver cuando un cliente entra. nos sirvieron el desayuno, no nos trajeron servilletas, tuvimos que pedirlos, y sin mucho interés nos las trajeron. No observamos amabilidad ni interés en el personal para atender a los clientes