Tienen un ambiente relajado, agradable para compartir entre amigos y familia. Durante mi visita el sistema de aire acondicionado no estaba funcionando de forma adecuada o lo tenían configurado en una temperatura muy alta, al punto que estaba sudando un poco. De entrada pedimos una croquetas de queso que fueron un éxito. Como plato fuerte pedimos hamburguesas, las cuales no fueron de nuestro agrado. El pan es muy bueno, pero la carne tiene una textura muy dura, reseca, como si no fuese preparada al momento. Definitivamente están a años luz de distancia de la calidad de las hamburguesas de otros restaurantes. Para ser un restaurante de hamburguesas, considero que tienen oportunidades de mejora, la textura y punto de cocción de la carne es algo que aportaría mucho valor. La atención de las chicas fue excelente, mostrando siempre una buena actitud y amabilidad.

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