Sientes que te trasladas a Europa con los pequeños detalles vintage que tienen en la cafetería. Es bonito el lugar, pero un poco descuidado en sentido de que las cosas se ven un poco viejo. Las muchachas eran amables, incluyendo la gerente o jefa. La comida es rica, pedimos unos pancakes que estaban super fluffy. Adicional a eso, pedimos la opción #1 del brunch que trae 2 tostadas, huevo revuelto, yogurt y 2 bebidas. Mis tostadas vinieron en bagel en vez de tostadas, en comparación con las fotos de otros foodies y el instagram de Dodo, lo cual son pequeños detalles que tal vez a otros no les molesten, pero a mí a lo personal no me gusto, me gustaría que me hubiesen comunicado antes.