Mi esposo me llevo como quien dice de sorpresa, porque no tenia ni idea de donde quedaba ni que tipo de comida probaríamos esta vez. A penas entre no me mato el ambiente, aunque después le entendí el estilo casero que posee. Mi experiencia fue magnifica, quede totalmente sorprendida y abrumada en un buen sentido, la comida es exquisita probamos unas brusquetas de entrada, ravioles 4 quesos que pidió mi esposo y termine robandole es simplemente delicioso y casero, yo pedi un fetucini con salmon, muy rico también pero mi favorito fue el ravioli. no pedimos postre porque estábamos llenisimos ya que las porciones son grandes, el mismo chef fue el que nos sirvio.. wao! excelente la atencion aunque el ambiente podrían mejorarlo. Lo ame