Lo mas sobresaliente de este lugar es el ambiente desde la entrada hasta cada detalle en los platos y mesas. El lugar es divino tanto adentro como afuera. Tienen platos únicos, con buena presentacion y sabor pero quizás el precio es algo elevado para la porción. Los postres y tragos son una locura. Incluso el café estaba delicioso. Sin duda regresaría es un lugar en donde uno se siente cómodo.