Tuve la oportunidad de visitar este restaurante luego de mucho tiempo teniendo ganas. Ambiente: el restaurante es muy acogedor y con un ambiente tradicional coreano, muy lindo. Comida: deliciosa, tenía expectativas bastante altas y lograron superarlas. El kimchi estaba espléndido al igual que los dumplings. Servicio: Muy amable el servicio, sin embargo esperamos casi 1 hora por la comida. Sin duda alguna, volvería a visitar.