Hace 1 mes fuimos por primera vez y nos encantó el Ramen y entradas. Hoy regresamos y la experiencia fué muy diferente, las gyozas estaban aún congeladas, alcanzé a morder una a la mitad y me dí cuenta, la mesera se las llevó y cuando las trajo ya bien cocinadas y calientes, venía la media que ya había mordido ( considero que la debió reemplazar u omitir, pero no regresarla a la mesa). Me pareció de mal gusto. La entrada del spicy tuna muy diferente y sin sabor comparado con la que pedimos la primera vez. El box Ebi Teriyaki muy grasosos los rollitos , los camarones tenían demasiada salsa que parecía más como un caldo. El encargado estaba allí, pero no se acercó en absoluto. Sugiero que las personas que atienden deberían tener en cuenta el perfume que usan, pues era notorio lo fuerte del perfume cuando se acercaban a la mesa. Regresaremos nuevamente por el Ramen y esperamos sea tan delicioso como el de la primera visita.