Fui por unas margaritas con unas amigas, sin embargo el precio de las mismas no siento que lo vale, primero la presentación del trago bastante pobre, y porción pequeña. Pienso que música estaba muy alta, entiendo que el ambiente es Mexicano y festivo, pero no se podía conversar sin gritar. Pedimos unos nachos de la abuela, la presentación del plato a mi parecer no es la mejor, sin embargo tenían buen sabor. No está dentro de mi top de sitios de comida mexicana.