Los wings con hueso muy buenos y de buen tamaños, a diferencia de otras franquicias de wings que dan pena por lo chiquito del pollito. Los wings deshuesados por otro lado mejor ni lo pidan. Mas bien parece bolitas de pechuga y carecen de la piel crispy necesario para un buen wing. Pedimos los nachos machos, malisimos. Los chips muy delgados, se aguaban fácil y se doblaban. El dip tirado por todos lados y muy pobre en cantidad. La cesta da la impresión de ser grande pero en realidad tiene un fondo falso alto y no es mucho lo que te dan. El resto del menú es muy pobre en selección. Muy curiosos los vasos en forma de envase de mayonesa.