Primera visita al local que se ubica en un patio de comidas y a pesar de eso la Decoracion con elementos de Cuba y la música tropical hacen del lugar agradable para pasar un rato. Pedi la lechona del menú con moros y cristianos y platano. Venía cubierta de cebolla abundante. No me gustó el plato por la gran cantidad de laurel en el arroz, difícil de quitar porque eran muchos y pequeños opacado el sabor del arroz con frijoles y del puerco. Sin tanto laurel, el arroz estaría delicioso. Volvería por otro plato a ver si tengo mejor suerte pues fue buena la cantidad, calidad, atención y presentación.