El lugar es bien elegante y bonito, los saloneros bien atentos y amables, cuando llega lo que ordenaste te explican cada plato. Pedimos dos rondas de ostras que estaban super frescas y buenisimas, ribs A5 (caro para la porción que sirven) , un tres leches, un kobe fried rice y un spicy salmon crispy rice, estos dos últimos estaban un poco salados pero buenos.