Siguiendo la tradición de esta franquicia Ítalo-americana y manteniendo parte de su gancho, como lo es ensalada o sopa sin restricción al pedir un plato fuerte y con los bread sticks para acompañar una muy buena pasta. El minestrone y la ensalada de la casa estuvieron muy buenas, el fettuccine Alfredo’s un clásico excelente, el spaghetti con camarones y pollo le colocan una exageración de pimentones que hace que se pierda la esencia del plato. El servicio bueno y muy rápido, el ambiente demasiado ruidoso para mi gusto.