Es la primera vez que venimos a este restaurante...y me recordó mucho a un restaurante similar que fuimos en Nueva York. El menú aquí es muy variado. Pedimos varias cosas para compartir. Aquí uno pide la carne/puerco/conchuelas/etc. y uno mismo tiene que ponerlos en la parrilla. Le aconsejamos de poner aceite a la parrilla, porque tuvimos dificultad en sacar los pedazos de carne ya que se pegaban a la parrilla. Dijeron que tomarían nota. No sé si Flor es la encargada, pero nos aconsejó en algunas cosas. Fue muy amable con nosotros. Regresaría por la comida y por el servicio,

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