El ambiente en la terraza es agradable y tienen buenas hamburguesas; aunque la que ofrecen este año en el Burger Week está sobrevalorada. La atención deja mucho que desear hasta para que te traigan un vaso de agua. No consideran a sus clientes al no disponer de estacionamientos ni de sillas o un área de espera; así que hay que sentarse en la escalera o quedarse de pie afuera.