Después de muchos años de no visitar este restaurante volvimos a ir, en esta ocasión en su nueva localidad. La comida estuvo muy rica, manteniendo la buena calidad de siempre. La atención estuvo bien, aunque pudieran prestar más atención a las mesas de las terrazas que a veces demoran un poco en atender. El lugar siempre acogedor, ideal para una rica comida, unas copas y una buena compañía.