Pedimos el dip de espinacas que estaba bueno. De plato fuerte risoto de tomate y risoto de cochinillo. Los dos bien elaborados y sabrosos. Lo malo fue el ambiente con una música discotequera a un volumen que no dejaba hablar con comodidad. Inapropiado para un restaurante. Por otra parte entre la entrada y el plato fuerte tuvimos que esperar media hora. El servicio mal.