En esta ocasión fuimos sólo por postre. El consenso unánime fue el “No Me Olvides” - la mayoría lo pidió de vainilla con malva; yo lo pedí de napolitano con chocolate. Este postre es toda una institución en la gastronomía panameña. A través de generaciones de panameños ha sido el favorito de muchos. La atención es bastante básica y el ambiente un poco apagado, pero los postres compensan

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