Este restaurante me llamo la atención, por los comentarios leídos. La cocina es de autor, lo cual de plano me pareció interesante y me me llamo la atención, el ambiente es agradable, buen servicio (solo que por favor no se vuelvan como en Estados Unidos, de preguntar a cada rato al cliente de que como esta la comida, que si esta bien, que si TODO esta bien...se vuelve demasiado empalagoso) me gusto la presentación de los platos, se nota el esmero, en lo personal, me gusto mucho lo que pedí: papas con costilla y langosta como plato principal, en la mesa también se pidió el pollito y el tartar de salmón, el pollito no fue extraordinario, buena presentación pero en sabor fue un pollo común y corriente, el tartar si estuvo bueno. Deberían aumentar un poco la cantidad de las porciones o disminuir un poco el precio, no por comparar pero en otros restaurantes similares en calidad/precio las porciones son un poco mas generosas. Me gustaría también sugerirles que incrementen las opciones en postres, por opciones que no lleven lácteos.