Lo he visitado en varias ocasiones y siguen ofreciendo las mejores pastas de Panamá Oeste y sin lugar a dudas uno de los mejores sitios para cenar de manera tranquila y con atención dedicada de sus meseros y encargado. En mi última visita llovía copiosamente y a la salida del restaurante ya me estaban esperando con un paraguas para llevarme al auto. Este tipo de atenciones están casi extintas en Panamá incluso en los mejores sitios. Los felicito y mantienen precios atractivos para los visitantes. Lo recomiendo.