Nos hospedamos en el hotel y pedimos servicio al cuarto; no vimos muchas opciones en el menú pero lo que elegimos estuvo muy rico. Dejé más de la mitad de mi plato para comermelo después y cuando regresé al cuarto habían entrado y se lo habían llevado sin consentimiento, me dio mucha rabia que tomaran esa acción ya que no es la medida que se emplea dentro del servicio al cuarto de un hotel y menos de uno al nivel de este.