La calidad es muy buena. Pero debemos ser razonables en los precios. No es posible que por un café expreso cobren 5.50 más impuesto y propina. Es decir que haya que desembolsar 6.50 dólares por un expreso que tiene un coste directo de 0.50 dólares, me parece un abuso y ante el que los consumidores debemos reaccionar.