El ambiente agradable, al aire libre y con música a un buen volumen. La atención cordial y la comida no es nada extraordinaria. Tomamos amapola (muy buena) sangría (algo dulce), mojito (riquísimo), Long Island (bueno), limonada (muy buena). La bandeja delicias, como lo indican, alcanza bien para dos personas, aunque si es solo para picar algo y no se va con mucha hambre, incluso 3 o 4 personas podrías compartirla. Las papas fritas y los patacones estuvieron buenos, al igual que los calamares y los dedos de pollo y de pescado, sobre todo por el aderezo con el que se acompañan que está muy muy bueno; no así las arañitas que son más harina que otra cosa. Los conos, aunque se siente bien el sabor, sería bueno que tuvieran un poco más de proteína, pues lo llenan más de vegetales. Los ceviches estuvieron bien, también. En conclusión, es un lugar al que puedes visitar para una tarde tranquila, si estás por el área de Amador.