La comida estuvo buena, pero hay otras opciones mejores aquí en la ciudad. Los rollos primavera tenían demasiada canela y comino; las chuletas sal y pimienta estaban en extremo picante, ya que tenían chile; el pollo con miel y ajonjolí estaba muy bueno. La limonada de coco tenía muy buen gusto, al igual que la de hierbabuena; ambas estaban en su punto. La atención sin embargo, dejó mucho que desear.