Muy bueno y estructurado el concepto, desde que llegas parece una hacienda, tiene diferentes locaciones y un segundo piso con reservados y mesas una terraza amplia abajo y Arriba un balcón pequeño pero con buena vista. Las parrilladas son muy buenas, buen sabor y termino correcto de las carnes, aún estando bien cocidas se sentía jugosa todavía. Buena atención. Si quieres sentirte un hacendado comiendo parrillas este es el lugar indicado.